Las misteriosas luces que iluminaron el cielo piurano el 13 de octubre, y el 13 de noviembre del 2001 llevaron al ufólogo, Anthony Choy a internarse por meses a Morropón, como investigador responsable del Incidente Chulucanas, aceptado y difundido por la Oficina de Investigación de Fenómenos Anómalos (OIFA).
Pero hace 11 días, la región de Grau fue testigo de lo que Choy asegura que fue otro encuentro con un fenómeno ovni.
El 20 de agosto, aproximadamente a las 9 p.m. arribamos al cerro Inclán, a nueve kilómetros de Piura. Cuando estábamos en plena vigilia, en la línea del horizonte aparecieron unas luces fijas muy potentes y empezaron a desplazarse en el cielo. El episodio duró casi una hora. Así relata el ufólogo Anthony Choy.
Choy arribó a la región de Grau para presentar el libro “Cerro Pilán: una carretera de ovnis”, del escritor Luis Vásquez Coronel, durante la II Feria del Libro de Piura. Durante su estadía aprovechó para visitar otros puntos calientes de avistamiento extraterrestre en la región.
Según, Choy Piura es conocida entre los ufólogos porque en esta zona se da con frecuencia este tipo de fenómenos. “Esta región es lo que en ufología se llama un ‘hot spot’ (punto caliente)”.
Seis personas fuimos testigos de lo ocurrido durante la vigilia ovni. Aún no me queda claro si las luces que observamos corresponderían a tres naves diferentes o a las partes de una sola. Los episodios fueron grabados con mi cámara y con la del cineasta local Darwin Adrianzén dijo Choy.
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